domingo, 31 de julio de 2011



Siembra la desconfianza. Eterna y muda como la espada de un guerrero.
Clávate en el alma dibujando una letra escarlata. Grábate un destino de hoy hasta siempre.
Dime ¿Qué rasgo es el que te delata? Si tu mirada se ha vuelto turbia o tus labios fieros. Quizá sean esas manos, pequeñas, puras como la nieve, que se van afilando hasta las yemas de tus dedos.
Que no confía en mí, dice, soy su reflejo. Soy todos sus temores metidos en un cuerpo pequeño. Soy el veneno. La daga negra. La declaración de guerra. La sentencia de muerte.
Fresca, siempre fresca, como esa flor letal impregnada de polen. Como la roca afilada de los acantilados.
Soy si se me teme.
Huelo su miedo y me conmueve.

jueves, 28 de julio de 2011


Un matiz diferente iluminado entre las sombras.
El lado desigual de este polígono.
El tritono.
La bruja buena. La princesa harapienta. El dejavù.
La mariquita azul entre las rojas.
El niño albino. Los ojos dispares. Los brazos cruzados.
Mírame, así, rota, aun sigo siendo bella.
El aroma del alma aun nubla la vista.
Y aquí, como esa línea escrita al margen del texto me siento extrañamente cómoda. No formando parte de nada, de ninguna parte, siento una calma pálida y reconfortante.
Sigo teniendo un hueco en el mundo. En mi caso una habitación privada. Y me gusta.
El sobresalto en la rutina. El tren que siempre va a la hora y se avería.
El recuerdo que ataca. El placer que mata.
El amigo del alma que ya no saluda.
Pieza de otro puzzle.
Me bronceo a la luz de la luna.

martes, 5 de julio de 2011


En un sueño nunca sabes cómo has llegado a estar donde estás. Como si unas alas amnésicas te hubieran transportado en un ligero vuelo.
La lucha después de eso es intentar recordar.
Echar la vista atrás y pasito a pasito, recorrer cada marca de tus talones hasta llegar a la línea de salida.
Hoy abro los ojos y no sé dónde estoy.
Muchos años han pasado de repente, pero no estoy segura de si hacia delante o hacia atrás. Simplemente me han transportado en el tiempo y estoy, pero no sé cuando.
Soñar es un regalo sin paquetes, sin lazos ni papel de colores. Es un regalo sin tarjeta ni remitente. Soñar es dulce y peligroso. Soñar es no ser quien eres por un instante y sentir como si así fuera.
Sueña, princesa, bajo el manto de estrellas que se esconde sobre el tejado. Esta noche todos velan por ti. Están despiertos, deseando, que jamás encuentres la línea de salida, para que puedas volver a empezar desde otra parte...

sábado, 2 de julio de 2011


Sólo contemplo el amor entre iguales, pero yo siempre quiero destacar.
Sólo entiendo el amor compartido, pero aquí, para mí, lo mío es mío.
Sólo entiendo el amor pasional, pero pase lo que pase todo mi cuerpo está dormido.
Estoy inundada de paz, de calma. De un mundo inmenso lleno de tranquilidad que no quiero perder. Y, sin embargo, me moriría por poder intercambiar cada parte de mi cuerpo, cada rincón de mi alma a cambio de recibir lo mismo de alguien.
No es más que una enorme contradicción.
No sé si no está la persona correcta o el momento oportuno.
Si eres tú o soy yo o son las circunstancias.
No sé si pido demasiado o si no quiero dar nada.
Sólo sé que no puede haber amor en una guerra abierta aunque sea silenciosa.
La mente de un poeta es un campo de minas.
Sí sólo sabes hablar de amor, no serás nunca un poeta.
Paga tu precio.

viernes, 1 de julio de 2011

Juguemos a indios y vaqueros.
Juguemos a que quieres conquistar mi mundo y yo tengo que oponer una feroz resistencia.
Alborótame todas las plumas en la aldea.
Corramos por campos infinitos a caballo, que se oigan los tiros y los gritos de la gente. Vivamos una historia trepidante donde ninguno de los dos tiene un nombre real.
Seamos sólo una leyenda.
Yo prometo dedicarme a arrancar cabelleras, tú promete que intentarás atarme y robar mi ganado. Me gusta saber que ninguno de los dos es inocente.
Aquí no hay príncipes, no hay princesas, aquí no hay dulces doncellas ni caballeros. Ya no hay nadie por quien valga la pena luchar.
Así que juguemos, vamos a entretenernos y, cuando todo acabe, al menos, lo contaremos.

"Esta es la vida que llevamos, la que elegimos y una cosa está clara, ninguno veremos el cielo"